Imagina que tus empleados trabajan desde su propio coche, pero por dentro llevan documentación de tu empresa.
Tú no puedes controlar el coche, pero sí necesitas proteger lo que hay dentro.
Así funciona el BYOD (Bring Your Own Device):
el dispositivo es personal, pero el contenido corporativo debe estar seguro.
¿Qué implica para una empresa?
- Flexibilidad para los empleados, que pueden trabajar desde donde quieran.
- Riesgos si no se aplican controles: fuga de datos, accesos no autorizados, dispositivos perdidos…
¿Cómo se protege sin invadir la privacidad?
Gracias a herramientas como Microsoft Intune o soluciones de MDM (Mobile Device Management), puedes:
- Separar la información personal de la profesional.
- Aplicar políticas de seguridad (como cifrado o bloqueo de apps).
- Borrar los datos corporativos de forma remota, sin tocar lo personal.
Conclusión
BYOD no es un riesgo, es una oportunidad.
Pero como toda oportunidad, necesita una buena estrategia.
Diseñamos políticas BYOD a medida para tu empresa,
combinando libertad para tu equipo y control para tu negocio.
